29/11 - Paramón, Filomeno y sus 370 Compañeros Mártires en Bitinia


San Paramón contendió por la piedad durante el reinado de Decio, en el año 250.


Un gobernante llamado Aquilino, buscando alivio a una enfermedad corporal, visitó cierto balneario con aguas medicinales que se encontraba en Basora, cerca del río Tigris. Traía consigo a 370 cristianos cautivos de Nicomedia y les exigió que sacrificaran en el templo de Isis. Cuando estos se negaron a ello, Aquilino los mandó matar a todos.


Antes de ser ejcutados, pasó por el camino que estaba junto al templo un respetado hombre llamado Paramón. Este se detuvo junto al grupo de hombres encadenados, se informó acerca de lo que ocurría y exclamó a gran voz: «¿Cuántos hombres justos e inocentes va a  asesinar este malvado gobernador por no postrarse ante sus mudos y sordos ídolos, como si fueran animales?». Cuando Aquilino lo oyó, se llenó de ira e inmediatamente ordenó que le mataran, sin saber de quién se trataba. Algunos lo golpearon con lanzas, y otros le atravesaron la lengua y el cuerpo con cañas afiladas hasta que murió.


En cuanto al martirio de San Filomeno, tuvo lugar durante el reinado de Aureliano, en el año 270. Procedente de Licaonia, llevaba una carga de trigo a Galacia cuando fue acusado de cristiano ante Félix, Gobernador de Ancira. Le atravesaron con clavos las manos, pies y cabeza y le ordenaron que corriera. Mientras lo hacía por el camino, Filomeno cayó al suelo y entregó su santa alma en las manos de Dios.



Fuente: GOARCH / laortodoxiaeslaverdad.blogspot.com

Traducción del inglés y adaptación propias