Este santo se perfeccionó en el monte de Nitria.
Al principio, y durante unos años, fue un ermitaño que se dedicaba al ayuno, oración y estudio de la palabra divina. Pero luego fue descubierto por cristianos que buscaban un guía espiritual y desde entonces la fama de su santidad se ha extendió por todas partes. Miles de visitantes acudieron a él para beneficiarse de sus enseñanza y humildad. Entonces San Or creó fraternidades y fundó monasterios en los que se cultivó con gran celo el trabajo espiritual y físico.
El Justo también tenía el don de la palabra y sabía cuándo callar y cuándo hablar.
Murió en paz a la edad de 90 años, manteniendo la claridad de su mente hasta su último aliento.
Fuente: saint.gr
Traducción del griego: Google Translator
Adaptación propia